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Como en todos los sectores, y en un mercado libre, la señalización
fotoluminiscente sufre una gran proliferación de señales de varias
procedencias, unas con marca, otras sin marca y otras incluso
mencionando los más asombrosos valores de fotoluminiscencia… La mayor parte de estas señales no tienen impresos los valores de luminancia ni las certificaciones que cumplen, y esto debería ser una exigencia del mercado. A tenor de éste error la elección de una señal será siempre muy difícil para aquellos que tienen la responsabilidad de decidir o analizar las propuestas de las distintas opciones. La tecnología de medición con un fotómetro es cara y no siempre está disponible para todo el mundo. Sin embargo, hemos desarrollado un método de ensayo práctico que no es cuantitativo (pero si cualitativo) y que puede dispersar las dudas existentes. Dicho método de ensayo se hace comparando la eficacia relativa de las señales a escoger. Se deberán colocar las señales a comparar en un recinto aislado de la luz exterior (oscuridad total) y estimular las señales con la incidencia de una lámpara fluorescente durante 30 minutos. Después de esta estimulación se deberá apagar la lámpara y observar la curva descendente de la luminancia de las señales sin abandonar el recinto oscuro. La luminancia de los primeros minutos emitida por las señales no se debe considerar, ya que según la norma UNE 23035 la medición válida inicial se realizará a partir de los 10 minutos. Las mayores diferencias de luminancia deberán ser detectadas entre los 10 y los 60 minutos. Con el paso del tiempo, la curva de decrecimiento permanece proporcional hasta que las señales quedan totalmente descargadas. Así pues, dicho ensayo práctico se puede completar entre los 10 y los 60 minutos, y los resultados obtenidos pueden facilitar la toma de decisiones. |